El impacto del COVID-19 en el mercado laboral nacional continúa su lenta recuperación. Misma situación ocurre en la región de Antofagasta, que comienza a aumentar sus cifras de ocupación respecto al mismo trimestre anterior.
Sin embargo, este aumento de la ocupación ha perdido la velocidad que mostraba en trimestres anteriores y, además, aún está muy lejos de los niveles de ocupación del mismo trimestre en el año anterior.
El boletín publicado este mes corresponde a los datos del trimestre móvil octubre-noviembre-diciembre (OND-2020), los que fueron publicados por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) el 29 de enero de 20211.
CIFRAS CLAVE | OND-2019 | SON-2020 | OND-2020 |
OCUPADOS | 314,808 | 290,308 | 290,879 |
DESOCUPADOS | 22,531 | 32,981 | 35,154 |
INACTIVOS | 195,573 | 225,604 | 223,800 |
TASA DE DESOCUPACIÓN | 6.7% | 10.2% | 10.8% |
TASA DE OCUPACIÓN | 59.1% | 52.9% | 52.9% |
TASA DE DESOCUPACION COMBINADA (SU3) | 12.8% | 23.0% | 23.2% |
TASA DE PARTICIPACIÓN | 63.3% | 58.9% | 59.3% |
Los principales resultados del trimestre son:
En el trimestre octubre-noviembre-diciembre (OND-2020), los ocupados aumentaron en 571 personas en comparación con el trimestre anterior. Si bien estas cifras son positivas, ellas muestran que, por una parte, aún existen casi 24 mil ocupados menos que en el mismo periodo de 2019 y, por otro lado, que la recuperación de la ocupación en la región se ha estancado. Estos resultados deben seguir siendo observados en los próximos meses, especialmente considerando que, a partir del 30 de diciembre pasado, la comuna de Antofagasta -centro laboral de la región- volvió a la fase 2 de transición como medida adoptada por el Gobierno para detener el aumento de casos de COVID-19.
Existe un crecimiento de la ocupación en comparación al trimestre móvil anterior, aumentando la cifra de ocupados en 571 personas, mientras que la desocupación aumentó en 2.173. En tanto, las y los inactivos disminuyó en 2.540, hecho que muestra que un grupo de personas que abandonó el mercado laboral durante la pandemia volvió a engrosarlo en OND-2020.
Pese a estas cifras levemente alentadores, el problema de la baja ocupación sigue siendo grave. La tasa de desocupación es mayor en cuatro puntos porcentuales en comparación a la que tenía la región de Antofagasta en el mismo trimestre de 2019.
La tasa de desocupación aumentó, pasando de un 10,2% a un 10,8%. Asimismo, la tasa de desocupación combinada (SU3) también aumentó, pasando de un 23% a un 23,2%.
Por tanto, aún no es posible señalar que la economía regional está mejorando de forma definitiva, ya que la tasa SU3 aún es muy alta y sigue indicando que casi una de cada cuatro personas que desean trabajar está sin empleo.
La brecha entre la tasa de desocupación y desocupación combinada disminuyó, alcanzando un 12,4%. Es importante destacar que, antes de la emergencia sanitaria, la brecha entre estas dos tasas de desempleo se mantenía estable y alrededor de un 6%, por lo que aún la diferencia entre ambos indicadores es muy alta en relación con el escenario anterior al estallido social y la pandemia.
En nuestro tema del mes, entregamos un análisis comparativo de la caída y recuperación de la ocupación entre las distintas regiones de Chile. En particular, el principal resultado es que hay una alta heterogeneidad territorial en las dimensiones de ocupación, desocupación e informalidad. De hecho, en la Región de Antofagasta se perdió un 16,4% de ocupación en el peor momento de la crisis, y ella aún se encuentra en un 7,7% por debajo de los niveles de 2019.
El gráfico muestra un crecimiento de la ocupación en comparación al trimestre móvil anterior, aunque aumentando solo en 571 personas, mientras que la desocupación aumentó en 2.173. En tanto, los inactivos disminuyeron en 1.804, hecho que muestra que la leve recuperación de la ocupación se debe al reingreso al mercado laboral de personas que no se encontraban buscando trabajo en trimestres anteriores.
Si bien existe un leve repunte en el mercado laboral regional, debemos tener en consideración el retroceso a fase 2 que experimentó Antofagasta el pasado 30 de diciembre, a fin de observar si esta medida afectará el crecimiento leve, pero sostenido, que se venía dando en las cifras de empleo a partir del trimestre JAS-2020.
La tasa de desocupación combinada (SU3), que suma a la tasa de desocupación los inactivos que están dispuestos a trabajar, pero que no han salido a buscar trabajo, aumentó levemente desde 23% a 23,2%, lo que continúa indicando, al igual que el trimestre anterior, que casi una de cada cuatro personas que desean trabajar siguen sin empleo.
Esta tasa aún refleja, por una parte, un escenario muy negativo respecto del mismo trimestre del año anterior y, por otro lado, un cambio estructural en el mercado laboral, ya que será difícil generar todos los puestos de trabajo después que pase la pandemia para este significativo grupo de habitantes de la región de Antofagasta. Esto muestra también la falta de una política para este sector que, como zona minera, tiene un ciclo productivo asociado al cobre y que no sigue el patrón nacional.
En tanto, la brecha entre ambas tasas disminuyó levemente en el trimestre en estudio, llegando a un 12,4% en comparación al 12,8% del trimestre SON-2020.
Si bien las tasas de desocupación y desocupación combinada (SU3) se movían de forma coordinada en el periodo anterior al estallido social y la pandemia, con una brecha estable alrededor del 6%, a partir de estos acontecimientos la diferencia entre ambos indicadores comenzó a aumentar. Lo anterior muestra un quiebre estructural en el mercado laboral y, además, apoya la hipótesis de que estamos enfrentando una crisis que sería de carácter permanente.
De todas formas, se reitera que la pandemia ya no se puede enfrentar como una crisis con secuelas temporales -y con alto rebote-, sino que debe leerse como una crisis que se está instalando y de la que tomará tiempo salir, especialmente a la luz del recrudecimiento de las cifras de afectados por el COVID-19 en Chile.
Tal como ha ocurrido en los trimestres anteriores, dentro de las creencias y motivos de deserción laboral, la mayoría de los encuestados señaló que está a la espera del “repunte del mercado”, reflejando que aún existe pesimismo en la región.
Sin embargo, quienes respondieron que se encuentran inactivos debido a que “no encontrarán” trabajo aumentaron en un 41,4% en comparación con el trimestre anterior, por lo que estamos frente a un preocupante crecimiento del desaliento en la región, el que podría incidir negativamente en las potenciales búsquedas de trabajo que hagan quienes actualmente están inactivos.
| OCUPADOS | DESOCUPADOS | INACTIVOS | ||||||
TRAMO EDAD | OND-2019 | OND-2020 | VARIACIÓN | OND-2019 | OND-2020 | VARIACIÓN | OND-2019 | OND-2020 | VARIACIÓN |
15 - 29 AÑOS | 67,616 | 56,236 | -16.8% | 10,557 | 16,297 | 54.4% | 89,770 | 100,352 | 11.8% |
30 - 44 AÑOS | 125,884 | 123,616 | -1.8% | 6,606 | 9,517 | 44.1% | 28,090 | 36,851 | 31.2% |
45 - 59 AÑOS | 91,517 | 84,319 | -7.9% | 4,319 | 5,944 | 37.6% | 28,127 | 32,331 | 14.9% |
60 O MÁS AÑOS | 29,791 | 26,708 | -10.3% | 1,049 | 3,396 | 223.7% | 49,586 | 54,266 | 9.4% |
Si bien la ocupación continúa aumentando en la región, las cifras no son alentadoras en relación con lo que ocurría en el mismo periodo de 2019. Al desagregar los datos por edad, es posible apreciar que los grupos etarios más afectados son los de los extremos (15 a 29 años y 60 años o más), con una disminución en la ocupación de 16,8% y 10,3%, respectivamente.
En cuanto al número de desocupados, los grupos que concentran el mayor aumento porcentual de desocupación son los menores de 30 años (54,4%) y los mayores de 60, quienes exhiben un preocupante 223,7% más de desocupación con respecto a OND-2019.
En lo relativo a las cifras de inactividad, la mayoría de las personas en esta situación están en el grupo de los menores de 30 años. De los aproximadamente 31 mil más inactivos más de la región, un 37,4% pertenece al rango etario entre 15 y 29 años. Por ello, se hace necesario fortalecer los planes de empleo juvenil, de modo tal de alentar el ingreso (y reingreso) de los trabajadores de menor edad al mercado laboral de la región de Antofagasta.
Los sectores que más aumentaron sus niveles de ocupación, con respecto al año anterior (OND-2019), son los de “Administración pública y defensa” (+4.882), “Actividades profesionales y administrativas” (+3.814), e “Industrias manufactureras” (+2.396).
Mientras que, los sectores que han aumentado su ocupación en mayor medida con respecto al trimestre anterior (ASO-2020) son “Construcción” (+3.712) y “Alojamiento y servicios de comidas” (+1.884). Si bien estas cifras son positivas, es necesario monitorear si esta tendencia seguirá dándose en el futuro, teniendo en cuenta que Antofagasta volvió a fase 2 el pasado 30 de diciembre.
| OCUPADOS | DESOCUPADOS | INACTIVOS | ||||||
NIVEL EDUCACIONAL | OND-2019 | OND-2020 | VARIACIÓN | OND-2019 | OND-2020 | VARIACIÓN | OND-2019 | OND-2020 | VARIACIÓN |
Primaria o menos | 30,644 | 22,918 | -25.2% | 975 | 3,378 | 246.5% | 42,161 | 32,761 | -22.3% |
Secundaria | 155,355 | 137,355 | -11.6% | 11,335 | 15,763 | 39.1% | 107,703 | 122,477 | 13.7% |
Técnica | 44,228 | 52,481 | 18.7% | 1,462 | 6,837 | 367.6% | 13,097 | 20,817 | 58.9% |
Universitaria o más | 84,273 | 77,973 | -7.5% | 8,758 | 9,174 | 4.7% | 32,613 | 43,881 | 34.6% |
En cuanto a la ocupación, se observa que el nivel técnico es el único que incrementa su ocupación con respecto a OND-2019. Ello viene ocurriendo desde hace algunos trimestres atrás, hecho que puede ser explicado debido a la gran importancia que tienen este tipo de ocupaciones dentro de la industria minera, que posee una importante participación en el mercado laboral regional.
Sin embargo, las cifras de desocupación no son alentadoras para ningún grupo. Todos, sin excepción, muestran un alza en comparación con ASO-2019, pero la diferencia es mucho mayor para quienes poseen educación primaria (+246,5%) y para los técnicos (+367,6%). Sin duda, esto muestra la fuerza con la que la crisis ha golpeado a la región de Antofagasta.
Las cifras de inactividad muestran que todos los grupos tienen más inactivos que en el mismo trimestre de 2019, a excepción de quienes cuentan con educación primaria. Esto muestra que personas con baja instrucción se han visto obligadas a buscar trabajo para superar los embates de la pandemia por COVID-19.
Como se anticipó en boletines anteriores, los efectos de la pandemia han hecho que la perdida de ocupación sea más fuerte para los trabajadores informales que para los formales.
Los trabajadores informales representan 20,9% del total de ocupados, disminuyendo en 11.977 con respecto al mismo trimestre de 2019.
Mientras la reducción de ocupados formales fue de 4,9%, los ocupados informales se redujeron en 16,4% con respecto a OND-2019.
En la región, el panorama no es optimista para los trabajadores informales. En el mismo trimestre de 2019, el empleo informal alcanzaba a más de 73 mil personas, mientras que esta cifra ha disminuido hasta poco más de 61 mil en el periodo OND-2020. En definitiva, los efectos de la pandemia han hecho que la pérdida de ocupación sea más fuerte para los trabajadores informales que para los formales.
Con respecto al trimestre anterior, los sectores que más ganan participación en ocupación informal son “Construcción” (+1.524) y “Otras actividades de servicios sociales y personales” (+865). Esto sugiere que el mercado de trabajo informal está prestando espacios para aminorar los impactos de la pérdida de ocupación en estos sectores más que en otros.
La caída y recuperación de la ocupación ha tenido diferentes intensidades para los distintos grupos que componen el mercado laboral regional. En esta sección, esperamos dar una visión general de cuáles han sido los grupos más golpeados por la pandemia. Con ello, se espera poder dar una idea de la magnitud de la crisis y los principales desafíos de la recuperación en la región.
En nuestro tema del mes, entregamos un análisis comparativo de la caída y recuperación de la ocupación entre las distintas regiones de Chile. En particular, el principal resultado es que hay una alta heterogeneidad territorial en las dimensiones de ocupación, desocupación e informalidad, tal como se muestra en los gráficos siguientes:
Editor general: Esteban López, Académico Escuela de Negocios, Director Ejecutivo CEPR-UAI, Investigado Adjunto COES.
Elaboración: Patricio Aroca, Director de Investigación Escuela de Negocios, UAI, Investigador Asociado COES.
Coordinación: Verónica Carreño, periodista CEPR y Boletín Laboral CEPR-COES.
Apoyo en programación: Martín Sielfeld, Ayudante CEPR-UAI y Boletín CEPR-COES.
El Boletín Laboral CEPR es un producto UAI con el apoyo del centro COES (ANID/FONDAP/15130009). Las opiniones expresadas son de exclusiva responsabilidad de sus autores y no representan necesariamente la opinión de UAI o COES