CIFRAS CLAVE | Pre-Pandemia MJJ-2019 | Durante la pandemia | Trimestre anterior | Trimestre actual |
OCUPADOS | 3,882,353 | 3,109,009 | 3,659,294 | 3,717,506 |
DESOCUPADOS | 333,817 | 486,077 | 421,534 | 389,008 |
INACTIVOS | 2,201,628 | 3,010,030 | 2,623,638 | 2,606,719 |
TASA DE DESOCUPACIÓN | 7.9% | 13.5% | 10.3% | 9.5% |
TASA DE OCUPACIÓN | 60.5% | 47.1% | 54.6% | 55.4% |
TASA DE DESOCUPACION COMBINADA (SU3) | 11.6% | 28.7% | 18.5% | 16.9% |
TASA DE PARTICIPACIÓN | 65.7% | 54.4% | 60.9% | 61.2% |
La comparativa nacional muestra que la Región Metropolitana tiene una tasa de desocupación de 4 puntos porcentuales menos que durante el mismo trimestre del año 2020. Además, es una de las regiones con mayor recuperación de empleos, teniendo solamente un 4,25% de ocupación por recuperar respecto al periodo pre-pandemia, siendo solamente superado por Antofagasta.
En comparación con el trimestre anterior, la ocupación aumentó con 58.212 personas, mientras que, la desocupación y la inactividad disminuyeron. Todos estos cambios son relativamente pequeños, por lo que se observa una recuperación lenta del impacto del COVID-19 en algunos de los mercados laborales regionales, hecho que ya podía apreciarse en los trimestres móviles anteriores.
En el tema del mes, usamos la información de la última encuesta CASEN para estudiar los efectos de la pandemia en la desigualdad del ingreso y como las ayudas y transferencias han ayudado con la caída del ingreso.
Los datos utilizados en la preparación de este boletín corresponden al trimestre móvil MJJ-2021 (mayo-junio-julio), publicados por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) el 31 de agosto de 2021.
Los principales resultados del trimestre son:
Existe un aumento de 58212 mil personas empleadas y una disminución de 32526 mil personas desocupadas entre el trimestre actual y el anterior. Adicionalmente se observa una caída de 16919 mil personas inactivas.
Con los últimos dos trimestres, la región Metropolitana ha logrado tener una mejora sustancial respecto a sus similares del año 2020, incluso llegando a acercarse a lo visto en 2018 y 2019.
A diferencia de los boletines anteriores, la mejora en el mercado laboral se ve reflejada en la evolución de la tasa combinada de desocupación (SU3), que logra bajar 1.6 puntos porcentuales. Lo anterior consolida la disminución del trimestre pasado; de la misma manera, la tasa de desocupación presenta una caída mayor a la observada en trimestres pasados, y muestra una disminución de 0.8 puntos porcentuales.
La gran destrucción de empleos, que se suma a las relaciones laborales suspendidas en el marco de la ley de protección del empleo, ha tenido consecuencias de mediano y largo plazo, más allá de la extensión de la crisis sanitaria. Será importante observar las trayectorias que sigue la recuperación del mercado laboral para los distintos grupos que lo componen, para así pensar en el diseño de políticas públicas enfocadas en grupos específicos y lograr finalmente tener los mismos números a los años prepandemia.
En relación al trimestre anterior, los desempleados disminuyeron en 32.526 personas, mientras que el flujo hacia inactivos alcanzó los cercanos 17 mil trabajadores. Por su parte, los ocupados aumentan en 58.212 personas.
Esto expresa números positivos que van consolidando la tendencia de recuperación que ha mostrado la región durante los últimos dos trimestres. Será necesario redoblar los esfuerzos y sostener los logros alcanzados últimamente para que se convierta en una tendencia clara.
El gráfico muestra la comparación de las tasas de desocupación y desocupación combinada (SU3). Esta última, a diferencia de la tasa de desempleo tradicional, considera también a las personas que, aun cuando no han buscado trabajo, y por lo tanto no son parte del cálculo tradicional de la tasa de desempleo (pues se clasifican como inactivos), sí declaran que estarían disponibles para trabajar.
En boletines anteriores hemos mostrado que antes de octubre de 2019 (es decir, en condiciones previas al estallido social y pandemia), estas dos tasas se movían de forma paralela. Sin embargo, desde el estallido social y en mayor medida desde la crisis COVID-19, la tasa de desocupación combinada comienza a crecer a mayor velocidad que la tasa de desempleo. Desde finales del año 2020 estas dos tasas se han estabilizado y vuelto a evolucionar de forma paralela.
En MJJ-2021 se observa que las principales creencias o motivos de deserción laboral es: “por vejez no encontrará” y esperando “al repunte del mercado”. Estás dos situaciones generan un pesimismo al momento de salir a buscar una oportunidad laboral.
Pese a esto, es necesario rescatar el hecho que este gráfico muestra el mismo comportamiento de que los anteriores, a saber: que los últimos dos semestres han representado una baja en cuanto al desaliento, por lo que vienen a ser trimestres de recuperación para la región Metropolitana.
| OCUPADOS | DESOCUPADOS | INACTIVOS | ||||||
TRAMO EDAD | MJJ-2019 | MJJ-2021 | VARIACIÓN | MJJ-2019 | MJJ-2021 | VARIACIÓN | MJJ-2019 | MJJ-2021 | VARIACIÓN |
15 - 29 AÑOS | 810,723 | 771,718 | -4.8% | 152,030 | 138,123 | -9.1% | 913,298 | 977,589 | 7% |
30 - 44 AÑOS | 1,479,513 | 1,520,380 | 2.8% | 113,771 | 139,768 | 22.9% | 268,629 | 336,949 | 25.4% |
45 - 59 AÑOS | 1,106,610 | 1,028,564 | -7.1% | 51,955 | 88,215 | 69.8% | 260,863 | 366,535 | 40.5% |
60 O MÁS AÑOS | 485,506 | 396,844 | -18.3% | 16,061 | 22,902 | 42.6% | 758,838 | 925,647 | 22% |
Este mes se observa que el grupo de 30-44 años ya recuperó su nivel de empleo prepandemia e incluso, lo aumentó en un 2.8% (40.867 personas). Caso contrario a las personas de 60 o más años, quienes han tenido una disminución de 18,3% de personas ocupadas. Esto se explica principalmente a que este grupo representa una población con altos factores de riesgo en el contagio de COVID- 19
Al analizar los desocupados, tanto el grupo de entre 45-59 años y 60 o más, muestran el mayor aumento en la tasa, con un 69.8% y un 42.5%, respectivamente.
Finalmente, los inactivos muestran un aumento principalmente en las personas de 30 a 44 años y 45 a 59 años, con una variación 25,4% a 40,5%, respectivamente.
Respecto al trimestre anterior, “otras act. y ss. sociales y personales” representan el mayor aumento, seguidos por “transporte, información y comunicaciones” y “comercio”. Por su parte, los empleos más afectados corresponden a “Industrias manufactureras”:
Al analizar a un año, los sectores con mejor evolución han sido “Comercio”, “Construcción” y “Transporte, Información y Comunicaciones”. Esto se explica principalmente por las medidas de relajamiento ante la contingencia de COVID-19
Si se observa a dos años, es decir, comparado con la etapa prepandemia, es posible visualizar que los únicos sectores beneficiados han sido “Electricidad, gas y agua”, pero sobre todo “Act. Financieras, Seguros e Inmobiliarias”.
| OCUPADOS | DESOCUPADOS | INACTIVOS | ||||||
NIVEL EDUCACIONAL | MJJ-2019 | MJJ-2021 | VARIACIÓN | MJJ-2019 | MJJ-2021 | VARIACIÓN | MJJ-2019 | MJJ-2021 | VARIACIÓN |
Primaria o menos | 437,840 | 333,550 | -23.8% | 30,867 | 36,069 | 16.9% | 537,618 | 577,550 | 7.4% |
Secundaria | 1,575,428 | 1,469,991 | -6.7% | 151,327 | 171,478 | 13.3% | 972,265 | 1,177,981 | 21.2% |
Técnica | 620,258 | 552,523 | -10.9% | 48,816 | 67,826 | 38.9% | 218,895 | 241,559 | 10.4% |
Universitaria o más | 1,233,844 | 1,332,645 | 8% | 101,904 | 110,134 | 8.1% | 467,209 | 563,676 | 20.6% |
Sin embargo, los trabajadores informales dentro de esta región representan el 26,5%, significando que - al menos- 1 de cada 4 personas trabaja sin medidas de protección social. A pesar de que han recibido aportes en forma del bono COVID, ingreso mínimo de emergencia, y el bono/préstamos para trabajadores independientes (recién entregado a principios de junio); estos recursos seguirán siendo insuficientes mientras se siga alargando la crisis dado el actual descontrol de la pandemia.
De todos modos, hay que destacar el hecho que los trabajadores formales fueron los más afectados, con una baja de 5,3%, representando a 153.112 personas menos. En el caso de los informales, su baja fue de 1.17%, es decir, 11.724 personas menos. En total, esto significa que hay 164.846 personas que han perdido sus empleos desde la pandemia, ya sean formales o informales.
En este último año, la mayor pérdida de trabajos informales se concentra en “Comercio” y “Actividades de los Hogares” y el aumento en “Construcción”.
Es interesante notar que, a diferencia de trimestres anteriores, la comparación con el trimestre pasado nos indica que hay una leve disminución en el número de ocupados informales en varios sectores.
Se destacan aumentos del empleo formal en “Transporte” y “Construcción”.
En nuestro tema del mes, revisamos los resultados de la Encuesta de Caracterización Socioeconómica Nacional (Casen) 2020 para analizar qué ha pasado con los ingresos de las y los trabajadores en pandemia. Cabe resaltar que estos datos nos permiten tener una mirada de lo que sucedió durante el 2020, pero no son necesariamente representativo de la situación actual.
El gráfico muestra el comportamiento de los ingresos por decil en la región, apreciándose cuánto de él se ha perdido y cómo han aportado las ayudas estatales a amortizar esta disminución.
Como se puede apreciar, los deciles 1 al 8 experimentaron una disminución de sus ingresos, mostrando varios de ellos caídas superiores al 50%. También se puede ver que la entrega del Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) benefició en mayor medida a los deciles 1 al 6, mostrando que, en general, este tipo de ayudas aporta más a los deciles de menores ingresos, dejando a la llamada clase media con menos herramientas y apoyos para hacer frente a la crisis.
Por otra parte, los deciles 9 y 10 son los únicos que, pese a la pandemia y la crisis económica derivada de ella, aumentaron sus ingresos, mostrando un aumento de las brechas salariales entre los deciles, situación que profundiza la ya significativa desigualdad existente y que se ha sugerido como una de las causas más importantes en el estallido social.
Este gráfico muestra la relación entre ingreso del trabajo e ingreso autónomo para cada decil. El primer concepto corresponde a los ingresos percibidos por sueldos o salarios, mientras que el ingreso autónomo suma, al ingreso del trabajo, otros tipos de ganancias como, por ejemplo, los montepíos, rentas de propiedades, jubilaciones, entre otros.
En la comparativa, que muestra la situación de 2017 y 2020, podemos apreciar que, a medida que nos acercamos a los deciles de mayor ingreso, el ingreso autónomo aumenta, mostrando que en general las personas de mayores ingresos suelen recibir otro tipo de ganancias que se suman a su ingreso del trabajo.
Asimismo, al comparar las situaciones de 2017 y 2020, se observa también que el ingreso del trabajo ha disminuido para todos los deciles, apreciándose que el décimo decil, el más pobre, es el más afectado con esta baja, con una variación del ingreso del trabajo de -$186.370.
Elaboración: Patricio Aroca, Director de Investigación Escuela de Negocios, UAI, Investigador Asociado COES.
Edición:
- Juan Pedro Eberhard, Director CEPR–UAI, Investigador Adjunto COES.
- Nicolás Grau, académico de la Facultad de Economía y Negocios (FEN), Universidad de Chile, Investigador Adjunto COES.
- Luis Herskovic, académico Escuela de Gobierno UAI, Investigador Adjunto COES.
Coordinación: Fernanda Zepeda Monroy, periodista CEPR y Boletín Laboral CEPR-COES.
Apoyo en Programación: Martín Sielfeld, Ayudante CEPR-UAI y Boletín CEPR-COES.
El Boletín Laboral CEPR es un producto UAI con el apoyo del centro COES (ANID/FONDAP/15130009). Las opiniones expresadas son de exclusiva responsabilidad de sus autores y no representan necesariamente la opinión de UAI o COES