CIFRAS CLAVE | EFM-2020 | DEF-2021 | EFM-2021 |
OCUPADOS | 697,237 | 620,463 | 625,227 |
DESOCUPADOS | 65,956 | 69,270 | 65,148 |
INACTIVOS | 579,269 | 661,808 | 661,898 |
TASA DE DESOCUPACIÓN | 8.6% | 10.0% | 9.4% |
TASA DE OCUPACIÓN | 51.9% | 45.9% | 46.2% |
TASA DE DESOCUPACION COMBINADA (SU3) | 22.8% | 24.1% | 23.0% |
TASA DE PARTICIPACIÓN | 56.9% | 51.0% | 51.1% |
La comparativa nacional muestra que la Región de Bío-Bío exhibe una tasa de ocupación menor en 11% a la de hace doce meses atrás, lo que la sitúa como la cuarta región más afectada por la pérdida de empleo en el sur de Chile.
En comparación con el trimestre anterior, la ocupación y la inactividad aumentaron en la región, mientras que la desocupación cayó. Eso sí, el crecimiento del empleo es levemente menor que el existente en DEF-2021, mostrando un cierto estancamiento de estas cifras.
En el tema del mes, revisamos la situación ocupacional en el país a un año de la llegada del COVID-19, con el fin de determinar qué sectores se han recuperado y cuáles aún están lejos de las cifras que exhibían en EFM-2020, requiriendo planes de ayuda que puedan mejorar su situación actual.
En el caso de la región de Bío-Bío, podemos apreciar que los grupos de trabajadores que no han logrado recuperar sus niveles de empleo son las mujeres, los trabajadores de entre 15 a 29 años, las personas empleadas en el sector “Comercio” y quienes poseen menores niveles de escolaridad (educación primaria o secundaria).
Los datos utilizados en la preparación de este boletín corresponden al trimestre móvil EFM-2021 (enero-febrero-marzo), publicados por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) el 30 de abril de 2021.
Los principales resultados del trimestre son:
Se observa un estancamiento de la tasa de recuperación del empleo, superando levemente las 625 mil personas con empleo remunerado. Sin embargo, el empleo aún es cerca de 72 mil puestos de trabajo menos que el mismo trimestre de 2020, lo que muestra que todavía existe un gran efecto de la pandemia en la ocupación regional y queda mucho empleo que recuperar.
Se observa que la cantidad de personas inactivas permanece casi constante, aumentando en 90 personas, con respecto al trimestre anterior.
En las personas que permanecen inactivas, se mantienen como principales razones para dejar de buscar empleo el esperar mejores condiciones del mercado laboral y el desaliento, pues las personas señalan que no están buscando empleo debido a que creen que “no encontrarán”.
A diferencia del trimestre anterior, se observa una reducción en el número de personas desocupadas en 4.122, mostrando que durante marzo hubo un leve repunte en este indicador.
La tasa de desocupación combinada (SU3), que considera también a los inactivos que estarían potencialmente dispuestos a salir a buscar trabajo, disminuyó en más de 1 punto porcentual, alcanzando un 23% en la región. Es importante destacar que, antes de la emergencia sanitaria, la brecha entre las tasas de desocupación y desocupación combinada en la región se mantenía estable y alrededor de un 9%. Sin embargo, tras ocho meses de pandemia en el territorio nacional, la diferencia entre ambos indicadores se mantiene en un 13,6%.
Se observa en los gráficos que el efecto más significativo es el aumento en la cantidad de trabajadores ocupados (4.764 personas) y una disminución en el número de desocupados en 4.122 personas.
Lo anterior, acompañado de un aumento en la cantidad de inactivos, muestra que durante este trimestre móvil quienes han encontrado trabajo son personas que habían estado buscándolo durante los meses anteriores.
La tasa combinada de desocupación (SU3) suma a la tasa de desocupación la proporción de personas inactivas que está dispuesta a trabajar, pero que no hizo esfuerzos por encontrar trabajo en las semanas previas a la encuesta. Esta tasa alcanzó un 23% en el trimestre EFM-2021, mostrando que todavía la situación de desocupación es muy grave. En tanto, la tasa de desocupación disminuyó levemente hasta alcanzar un 9,4%.
Estos indicadores muestran que la situación de la desocupación sigue siendo grave, dado que al menos una de cada cinco personas que desea trabajar se encuentran sin empleo.
| OCUPADOS | DESOCUPADOS | INACTIVOS | ||||||
TRAMO EDAD | EFM-2020 | EFM-2021 | VARIACIÓN | EFM-2020 | EFM-2021 | VARIACIÓN | EFM-2020 | EFM-2021 | VARIACIÓN |
15 - 29 AÑOS | 143,558 | 116,803 | -18.6% | 28,849 | 23,572 | -18.3% | 203,860 | 227,689 | 11.7% |
30 - 44 AÑOS | 249,336 | 230,584 | -7.5% | 20,716 | 25,270 | 22% | 66,619 | 84,239 | 26.4% |
45 - 59 AÑOS | 224,772 | 208,557 | -7.2% | 13,109 | 13,018 | -0.7% | 89,860 | 110,563 | 23% |
60 O MÁS AÑOS | 79,571 | 69,282 | -12.9% | 3,282 | 3,288 | 0.2% | 218,929 | 239,407 | 9.4% |
La ocupación disminuyó en todos los rangos etarios en comparación con EFM-2020, mientras que la inactividad aumentó también para todas las edades.
En lo relativo a la desocupación, ella disminuyó en casi todos los grupos, a excepción de las personas entre 30 y 44 años, quienes aumentaron su desocupación en un 22%.
En comparación con el trimestre pasado, es posible observar que la mayor pérdida de participación en la ocupación regional se dio en los sectores de “Administración pública y defensa” (-3.599), “Actividades financiera, seguros e inmobiliarias” (-2.507) y “Transporte, información y comunicaciones” (-2.442), mientras se observan los mayores incrementos en las áreas de “Industrias manufactureras” (+4.282) y “Agricultura, ganadería, silvicultura y pesca” (+2.928).
En tanto, al contrastar las cifras actuales con el mismo periodo de 2020, es posible apreciar que todos los sectores económicos muestran un menor nivel de ocupación, siendo las áreas más afectadas las de “Comercio” (-22.477), “Actividades de los hogares” (-14.010) y Alojamiento y servicios de comidas” (-10.381).
| OCUPADOS | DESOCUPADOS | INACTIVOS | ||||||
NIVEL EDUCACIONAL | EFM-2020 | EFM-2021 | VARIACIÓN | EFM-2020 | EFM-2021 | VARIACIÓN | EFM-2020 | EFM-2021 | VARIACIÓN |
Primaria o menos | 120,482 | 95,894 | -20.4% | 7,808 | 7,305 | -6.4% | 190,119 | 199,282 | 4.8% |
Secundaria | 291,566 | 258,510 | -11.3% | 26,314 | 29,292 | 11.3% | 232,712 | 283,609 | 21.9% |
Técnica | 105,015 | 97,321 | -7.3% | 10,266 | 7,623 | -25.7% | 48,951 | 52,981 | 8.2% |
Universitaria o más | 173,398 | 171,506 | -1.1% | 20,977 | 20,927 | -0.2% | 94,683 | 115,875 | 22.4% |
Al analizar el trimestre EFM-2021 podemos observar que, a menor nivel educacional existe una mayor pérdida porcentual de la ocupación. De hecho, mientras quienes poseen educación primaria la ocupación disminuyó en casi 25 mil personas mientras que las personas con estudios superiores finalizados reducen la ocupación en casi 2 mil personas en DEF-2020. Este es un efecto que se ha observado durante toda la pandemia.
La desocupación disminuyó en casi todos los grupos, a excepción de quienes cuentan con educación secundaria, con un 11,2% más de desocupados que en 2020.
En tanto, los inactivos aumentaron en mayor porcentaje en los grupos que cuentan con educación secundaria (+21,9%) y universitaria (+22,4%),
Estos resultados por nivel educativo plantean un gran desafío social, ya que el gran impacto en la ocupación se ejerce sobre el grupo de menor educación que, al mismo tiempo, es el grupo de más bajos ingresos. La encuesta CASEN muestra sistemáticamente que el salto en ingresos está asociado a la educación superior y técnica profesional, mientras que en el caso de los trabajadores que solo poseen enseñanza media completa o inferior, sus ingresos tienden a ser considerablemente menores. Por esta razón, existe una posibilidad de que una gran proporción de este grupo incremente la población bajo la línea de pobreza, lo que demandará políticas especiales y urgentes.
Como se anticipó en boletines anteriores, los efectos de la pandemia han hecho que la pérdida de ocupación sea más fuerte para los trabajadores informales que para los formales.
Los trabajadores informales representan 25,2% del total de ocupados, disminuyendo en 21.858 con respecto al mismo trimestre de 2020.
Mientras la reducción de ocupados formales fue de 9,6%, los ocupados informales disminuyeron en 12,1% con respecto a EFM-2020.
En el mismo trimestre de 2020, el empleo informal alcanzaba a más de 179 mil personas, mientras que esta cifra ha disminuido a 157 mil personas en el periodo EFM-2021.
Los sectores que más ganan participación en ocupación informal con respecto al trimestre pasado son los de “Agricultura, ganadería, silvicultura y pesca” (+2.871) e “Industrias manufactureras” (+2.125). Esto sugiere que el mercado de trabajo informal está prestando espacios para aminorar los impactos de la pérdida de ocupación en estos sectores más que en otros.
En nuestro tema del mes, revisamos la situación ocupacional en el país a un año de la llegada del COVID-19, con el fin de determinar qué sectores se han recuperado y cuáles aún están lejos de las cifras que exhibían en EFM-2020, requiriendo planes de ayuda que puedan mejorar su situación actual.
En la Región de Bío-Bío, podemos apreciar diferentes escenarios para hombres como para mujeres. En el caso del empleo masculino, este ha tenido una recuperación que incluso mejora las cifras exhibidas hace doce meses atrás en los sectores de “Actividades profesionales y administrativas”, “Educación”, “Industrias Manufactureras” y “Agricultura, ganadería, silvicultura y pesca”.
Por otra parte, uno de los sectores en los que el empleo masculino ha sido severamente afectado es “Actividades financieras, seguros e inmobiliarias”, por lo que se debe tener especial atención para determinar si este sector mejorará sus cifras a futuro o si necesita planes de apoyo para sus trabajadores.
En el caso del empleo femenino, este muestra niveles menores de recuperación que los hombres, especialmente en los sectores de “Explotación de minas y canteras” y “Actividades de los hogares”, este último de especial cuidado, dado que son ellas las que más se emplean en esta área.
En lo relativo al número de ocupados por sector económico y rango etario, podemos ver que uno de los casos que más llama la atención es el del sector “Comercio”. Aquí, el tramo entre 30 y 44 años ha aumentado su nivel de ocupación levemente, mientras que el resto de los grupos ha disminuido, en especial en las personas de 45 o más años, que tienen cerca de 17 mil menos empleos en esta área.
Por otra parte, el grupo entre 15 y 29 años ha sido el que menor recuperación ha logrado, encontrándose en casi todos los sectores por debajo de las cifras de ocupación de EFM-2020.
En lo relativo a la recuperación del empleo por categoría de ocupaciones y nivel educacional, se aprecia que quienes han logrado mejorar e incluso superar los niveles de hace doce meses atrás son mayoritariamente quienes poseen educación técnica o universitaria, en desmedro de las personas con educación primaria o secundaria, quienes han logrado una recuperación aún muy lenta.
Por ello, se hace necesario apoyar a trabajadores con menores niveles de escolaridad con planes y programas que les permitan recuperar sus niveles de trabajo de EFM-2020, toda vez que suelen ser los más afectados por las crisis como la actual.
Editor general: Esteban López, Académico Escuela de Negocios CEPR-UAI, Investigador Adjunto COES.
Autores:
- Hugo Salgado, Universidad de Concepción.
- Patricio Aroca, Director de Investigación Escuela de Negocios, UAI, Investigador Asociado COES.
Edición: Verónica Carreño, periodista CEPR y Boletín Laboral CEPR-COES.
Apoyo en Programación: Martín Sielfeld, Ayudante CEPR-UAI y Boletín CEPR-COES.
El Boletín Laboral CEPR es un producto UAI con el apoyo del centro COES (ANID/FONDAP/15130009). Las opiniones expresadas son de exclusiva responsabilidad de sus autores y no representan necesariamente la opinión de UAI o COES