Se observa que continúa la leve mejoría en el impacto del COVID-19 en el mercado laboral regional observada en el trimestre anterior.
El boletín publicado este mes (Octubre), corresponde a los datos del trimestre móvil Julio-Agosto-Septiembre (JAS-2020), los cuales fueron publicados por el INE el 30 de octubre de 20201.
CIFRAS CLAVE | JAS-2019 | JJA-2020 | JAS-2020 |
OCUPADOS | 3,932,803 | 3,169,284 | 3,282,143 |
DESOCUPADOS | 346,593 | 496,955 | 501,083 |
INACTIVOS | 2,169,950 | 2,951,047 | 2,842,787 |
TASA DE DESOCUPACIÓN | 8.1% | 13.6% | 13.2% |
TASA DE OCUPACIÓN | 61.0% | 47.9% | 49.5% |
TASA DE DESOCUPACION COMBINADA (SU3) | 11.9% | 27.5% | 25.9% |
TASA DE PARTICIPACIÓN | 66.4% | 55.4% | 57.1% |
Los principales resultados del trimestre son:
El mayor flujo ha sido de empleo a inactividad, es decir personas que salen del mercado laboral, pues dejan de buscar empleo activamente. De hecho, hubo un aumento en 672 mil personas inactivas respecto del mismo trimestre del año 2019. Es por esta razón que el análisis de la situación del mercado laboral actual no debe restringir su foco a la evolución de la tasa de desempleo, sino que mirar con especial atención la evolución del empleo y el grupo de inactivos.
Existen 112.859 más ocupados respecto al trimestre inmediatamente anterior, continuando la mejoría observada en el boletín anterior. A su vez, los inactivos caen en un número prácticamente equivalente al aumento del empleo, a saber, hay 108.260 menos inactivos respecto al trimestre anterior. La variación en número de desempleados es menor, lo que confirma que el grueso de los ajustes durante esta crisis ha sido el paso de empleo a inactividad y viceversa.
Esta mejoría se ve reflejada en la evolución de la tasa combinada de desocupación, la que al igual que en el trimestre anterior, vuelve a caer (esta vez 1.6 puntos porcentuales). La tasa de desocupación convencional se mantiene estable aunque también exhibe una leve caída (0.4 puntos porcentuales). Esta diferencia refuerza la idea de que en una crisis como la actual, donde la inactividad tiene tanta variación, lo correcto es mirar la variación del empleo o bien de la tasa combinada de desocupación, la que considera a las y los inactivos que trabajarían en caso de poder hacerlo.
A pesar de lo anterior, las perspectivas futuras de las y los inactivos parecen empeorar levemente respecto al trimestre anterior, dado que señalan que no buscan trabajó pues creen que “no encontrarán” o que no se produirá “repunte en el mercado”.
Como en boletines anteriores, se observa que los grupos más vulnerables, es decir, los de bajo nivel de educación e informalidad laboral, han sido los más afectados por el shock sobre el mercado laboral producto de la crisis sanitaria, en el sentido que su disminución en el número de ocupados es proporcionalmente más alta.
La gran destrucción de empleos, que se suma a las relaciones laborales suspendidas en el marco de la ley de protección del empleo, tendrá consecuencias de mediano y largo plazo, más allá de la extensión de la crisis sanitaria. Será importante observar las trayectorias que sigue la recuperación del mercado laboral para los distintos grupos que lo componen, para así pensar en el diseño de políticas públicas enfocadas en grupos específicos.
En este boletín, al igual que en el anterior, se incluye un análisis más detallado respecto a la dimensión de género. Al respecto, lo primero que resalta es que la crisis ha golpeado fuertemente a ambos géneros. En términos porcentuales la caída en empleo ha sido levemente mayor en el caso de las mujeres. Adicionalmente, en sectores económicos de alta participación de mujeres, se observan caídas significativas en el empleo de mujeres, lo que indica que para recuperar el empleo femenino se debe apuntar a esos sectores. También se observa que la recuperación no ha llegado para trabajadores de educación primaria,
En el trimestre Julio-Agosto-Septiembre (JAS) 2020, los ocupados disminuyeron en 650.660 en comparación con el mismo trimestre del 2019, una reducción que equivale a un 17%. Esto implica una fuerte disminución de la actividad del mercado laboral sugiriendo una caída significativa también en la producción y el crecimiento.
El grupo de inactivos aumentó en 672.837 con respecto al trimestre JAS de 2019. Una característica de estos meses de crisis ha sido que una gran proporción de quienes pierden un trabajo, no salen a buscar uno nuevo.
El siguiente gráfico muestra la comparación de las tasas de Desocupación y Desocupación Combinada (SU3). Esta tasa, a diferencia de la tasa de desempleo tradicional, considera también a las personas que aun cuando no han buscado trabajo, y por lo tanto no son parte del cálculo tradicional de la tasa de desempleo, sí declaran que estarían disponible a trabajar.
Como se observa en el gráfico, antes de octubre 2019 (condiciones pre-estallido social y pandemia), estas dos tasas de desempleo se movían de forma paralela. Sin embargo, en los últimos meses, la tasa de Desocupación SU3 comienza a crecer a mayor velocidad que la tasa de desempleo, lo que sugiere un quiebre estructural en el mercado laboral, y apoya la hipótesis de que estamos entrando en una crisis que no es temporal, sino que de un carácter más permanente.
Sin embargo, este boletín muestra una reducción en la tasa SU3, y una leve disminución en la tasa de desocupación tradicional. Esto significa que potenciales trabajadores están empezando a buscar trabajo, lo que puede significar el inicio de una futura recuperación. Así, se puede dar la paradoja que mientras el mercado laboral se estabiliza, e incluso mejora, la tasa de desempleo no mejora o incluso empeora. Aquello se explica simplemente porque la tasa de desempleo no es un buen indicador durante crisis que tienen un fuerte impacto sobre la inactividad.
Cabe hacer notar que, durante este trimestre, la ley de protección del empleo se encuentra en pleno uso, por lo que aún no observamos la caída en el empleo adicional, asociada a la disminución del apoyo que entrega esta política pública. Por lo tanto, es importante considerar el potencial efecto que puede tener el término de esta política pública.
Es posible observar algunas variaciones pequeñas en las razones que esgrimen las personas inactivas para no buscar trabajo. Parece ser relevante el aumento en la cantidad de personas que no busca tabajo debido a que cree que no encontrará trabajo.
Sin embargo, se observa una disminución en la razón “no encontró”, lo que es consistente con la leve mejoría observada en los datos.
| OCUPADOS | DESOCUPADOS | INACTIVOS | ||||||
TRAMO EDAD | JAS-2019 | JAS-2020 | VARIACIÓN | JAS-2019 | JAS-2020 | VARIACIÓN | JAS-2019 | JAS-2020 | VARIACIÓN |
15 - 29 AÑOS | 825,755 | 606,174 | -26.6% | 150,965 | 173,172 | 14.7% | 909,871 | 1,097,951 | 20.7% |
30 - 44 AÑOS | 1,502,305 | 1,368,236 | -8.9% | 123,840 | 203,096 | 64% | 243,768 | 407,136 | 67% |
45 - 59 AÑOS | 1,112,704 | 933,407 | -16.1% | 53,997 | 94,577 | 75.2% | 252,094 | 430,892 | 70.9% |
60 O MÁS AÑOS | 492,040 | 374,327 | -23.9% | 17,792 | 30,238 | 70% | 764,217 | 906,808 | 18.7% |
Al comparar la evolución de inactivos con la información del trimestre inmediatamente anterior se observa que hay una reducción de inactivos entre los menores de 55 años, pero esta disminución pareciera estancarse o incluso revertirse para los mayores de 55 años.
Dada su alta mortalidad al contraer el COVID-19, el grupo etario sobre los 64 años deberá ser mucho más cauto al salir a buscar trabajo para no contagiarse y, por lo tanto, su generación de ingresos será más difícil. Por ello, se debe pensar en una política especialmente orientada a este segmento de modo de reducir los riesgos de contagio y los efectos económicos en sus tasas de empleo. Ello pondrá más presión al sistema de pensiones chileno, él que no ha sido capaz de entregar pensiones de un monto suficiente.
Al comparar la evolución de inactivos con la información del trimestre inmediatamente anterior se observa que hay una reducción de inactivos entre los menores de 55 años, pero esta disminución pareciera estancarse o incluso revertirse para los mayores de 55 años.
Dada su alta mortalidad al contraer el COVID-19, el grupo etario sobre los 64 años deberá ser mucho más cauto al salir a buscar trabajo para no contagiarse y, por lo tanto, su generación de ingresos será más difícil. Por ello, se debe pensar en una política especialmente orientada a este segmento de modo de reducir los riesgos de contagio y los efectos económicos en sus tasas de empleo. Ello pondrá más presión al sistema de pensiones chileno, él que no ha sido capaz de entregar pensiones de un monto suficiente.
Los sectores que en general representan una mayor proporción del empleo este trimestre (JAS-2020 en barras) son Comercio, Servicios Personales y Sociales y Industrias Manufactureras. Luego hay tres sectores con una relevancia muy similar: Actividades profesionales y administrativas, Transporte y Educación.
| OCUPADOS | DESOCUPADOS | INACTIVOS | ||||||
NIVEL EDUCACIONAL | JAS-2019 | JAS-2020 | VARIACIÓN | JAS-2019 | JAS-2020 | VARIACIÓN | JAS-2019 | JAS-2020 | VARIACIÓN |
Primaria o menos | 442,188 | 286,520 | -35.2% | 29,070 | 40,205 | 38.3% | 543,407 | 597,512 | 10% |
Secundaria | 1,580,538 | 1,246,793 | -21.1% | 132,729 | 223,806 | 68.6% | 986,650 | 1,302,520 | 32% |
Técnica | 610,438 | 557,995 | -8.6% | 66,810 | 84,958 | 27.2% | 195,454 | 280,288 | 43.4% |
Universitaria o más | 1,275,992 | 1,151,245 | -9.8% | 116,869 | 146,978 | 25.8% | 435,583 | 609,143 | 39.8% |
Cómo es común durante períodos de disminución de la actividad económica, los trabajadores de menor capital humano son los que proporcionalmente sufren más la caída en la ocupación. En específico, 73% (489 mil) de los 666 mil trabajadores que perdieron su trabajo con respecto al trimestre JAS-2019 son trabajadores con educación Primaria o Secundaria.
Cabe destacar que los fuertes cambios porcentuales en la desocupación, en comparación a los cambios porcentuales en la ocupación, se deben a que el número de desocupados tiene una base mucho menor. Sin embargo, se destaca el aumento significativo en el desempleo de los trabajadores con educación secundaria (68.6%) y educación primaria (38.3%).
Tal como sucede en trimestres anteriores, se puede observar que la destrucción de trabajo es mucho menor en el nivel educacional técnico y universitario. Esto se puede deber a características de los empleos o de los empleadores que les permitan sobrevivir a la situación actual o a que estos grupos posiblemente tienen ocupaciones con mayores posibilidades de ser realizadas de forma remota.
Con respecto al número de ocupados que perdieron su puesto de trabajo, en relación a lo observado el año anterior, se aprecia que el grupo más afectado son los trabajadores con educación primaria o menos.
Es importante dar una mirada especial a la informalidad laboral, dado que es el sector de la economía más desprotegido a los efectos económicos del COVID-19.
La estructura sectorial de los trabajadores muestra que la informalidad se concentra en el sector Servicios, mientras que los sectores de la Minería, Electricidad, Gas y Agua y Act. Financieras es donde se concentran los trabajos formales.
Se aprecian aumentos relativos importantes de trabajadores informales en Industrias Manufactureras.
En el boletín pasado exploramos la diferencia de esta crisis con anteriores, y mostramos como el empleo femenino ha sufrido más que en crisis anteriores. Adicionalmente, notamos que hay marcadas diferencias entre mujeres con y sin pareja, y mujeres que son o no jefas de hogar.
Para poder entender mejor este fenómeno, este mes estudiamos los comportamientos del mercado laboral por género, pero mirando los distintos sectores y niveles educacionales. Es notorio ver que, en sectores con alta participación de mujeres como son las Actividades de los Hogares, y servicios sociales y personales, se observa una caída significativa en el empleo femenino, pero no así de hombres lo que aumenta la brecha en la caída en ocupación. Se observa también que en sectores que concentran un gran número de trabajadores, como comercio y manufactura los movimientos son similares para ambos géneros. Sólo en construcción se observa una caída significativa para hombres, y no para mujeres, dentro de los sectores con más empleo.
Estas diferencias sectoriales pueden ser importantes a la hora de implementar políticas de recuperación del empleo. Las mujeres tienen una alta participación laboral en sectores como Actividades del Hogar, Educación y Servicios Sociales y Personales. Es posible que en este tipo de actividades haya una mayor cantidad de PYMES, o incluso trabajo por cuenta propia, por lo que puede que los programas de subsidio del empleo no sean ampliamente utilizados en estos sectores. Por lo tanto, es importante considerar las diferencias entre la composición de género
Otra dimensión que puede marcar diferencias en la recuperación del empleo por género es el nivel educacional. El gráfico muestra la evolución del número de ocupados sectores de alta participación de la mujer, separados por género y por grupo educacional.
Es fácil observar que no ha existido recuperación del empleo tanto para hombres como mujeres con educación primaria.
En el sector de Servicios Sociales y personales, se observa una significativa recuperación para hombres con educación universitaria y secundaria, pero una caída en la ocupación de mujeres universitarias, y muy poca recuperación para las mujeres en los otros grupos educacionales.
El comercio presenta patrones similares tanto para hombres como mujeres, y relativamente similares entre grupos educativos también, a excepción de los con educación primaria. En las actividades profesionales, se observa una leve mejora en la recuperación para mujeres con educación universitaria.
Elaboración: Esteban López, Director Ejecutivo CEPR - UAI
Edición:
- Juan Eberhard, Director CEPR - UAI
- Nicolás Grau, Profesor FEN, Universidad de Chile
- Luis Herskovic, Profesor Escuela de Gobierno, UAI
Apoyo en Programación: Martín Sielfeld, Ayudante CEPR - UAI
El Boletín Laboral CEPR es un producto UAI con el apoyo del centro COES (ANID/FONDAP/15130009). Las opiniones expresadas son de exclusiva responsabilidad de sus autores y no representan necesariamente la opinión de UAI o COES